Hoy llegan los reyes magos y aunque no lo creáis a mi me hace mucha ilusión aunque ya no sea una niña.
Aunque cada vez más se instale en las fiestas navideñas papa noel yo me sigo quedando con los reyes magos o majos como yo digo. Es una fiesta que a mi trae muy buenos recuerdos. Sobre todo de mi infancia.
Me acuerdo cuando era pequeña que la noche de reyes no podía dormir porque estaba muy nerviosa. Todas las noches de reyes dejaba en una mesa en la sala un vaso de casera, era lo que mi madre me mandaba dejar, y unas galletas. Y por la mañana me despertaba muy temprano para ver lo que me habían traído los reyes. Siempre me dejaban los regalos en el pasillo y la verdad que siempre se portaban muy bien conmigo.
No recuerdo a que edad me enteré que los reyes eran las personas y no tres hombres subidos en camellos. Me lo dijeron en el cole y la verdad que pillé un disgustó. Todo eso hizo que con los años, viendo la situación económica de mi casa decidiese no pedir cosas sino que me trajeran lo que pudieran.
Durante un tiempo sobre todo cuando vivía mi madre hacía una lista con las cosas que me gustaban para que no me preguntaran lo que quería, porque es una cosa que no soporto. A si que si me decían algo les enseñaba la lista. A veces me hacían caso y otras veces no.
Nunca me gustó que me regalasen dinero porque prefería cualquier detalle aunque fuera pequeñito. Porque creo que lo que importa es la intención y no tiene porque ser un regalo carísimo. Aunque como he dicho ya no soy una niña me encanta el ritual de los regalos guardados para que no los encuentren, la intriga hasta el último momento y no soporto que me den los regalos anticipados.
Pero si hay una cosa que ha cambiado ahora no me importa que me den dinero porque lo necesito y a si ya lo utilizo yo en lo que sea.
Y una cosa que me encanta es ir a ver la cabalgata de los reyes magos, disfruto como si fuera una niña. Y la vivo con mucha ilusión. Por cierto mi rey preferido es el rey Melchor, no me digáis porque. Yo voy les grito, recojo caramelos y soy feliz. Pero por desgracia llevo varios años sin ir a verla por circunstancias varias. Espero poder ir a verla en otra ocasión.
Por todo esto quiero seguir teniendo ilusión por esta noche, tenga los años que tenga.
Feliz noche de reyes los mejores regalos no son materiales sino sentimentales.
Buenas noches soletes que os traigan los reyes aquello que más deseis.
Besitos
lunes, 5 de enero de 2015
DONDE ESTÁ LA EDUCACIÓN
Mi entrada de hoy tiene relación con algo que me parece super importante: la educación.
Siempre me he considerado una persona bastante educada, aunque a veces la verdad me apetezca ser borde y maleducada. Pero nunca lo consigo a no ser que esté muy enfadada y salte porque ya esté harta.
Yo entiendo que muchas veces por los días que vivimos en continuo estrés, por la falta de trabajo, por tenerlo pero no tener unas buenas condiciones de trabajo, por cansancio...etc no nos apetece sonreír e incluso ni decir buenos día, ni ser sociables...pero no puede ser a si porque el resto de personas no tienen la culpa de como esté uno.
Desde siempre me he sentido orgullosa de la educación que me dio mi madre, que tuvo que educarme sola al quedar viuda muy joven. Siempre he dicho buenos días, buenas tardes, gracias a cualquier persona. Y lo sigo haciendo cuando entro en algún sitio, cuando me encuentro con alguien, etc. Incluso como me parece sumamente importante esto, intento que las niñas que cuido sean educadas y mis sobrinos también. Porque según seas a si te trataran.
Considero que por ejemplo si estas trabajando cara al público, una tiene que tener buena cara, sonriente y agradable con la persona que entra pero sin agobiar. A mi me ha pasado muchas veces de entrar en alguna tienda y ni decirte buenas ni casi darse cuenta de que estás dentro. Y otras veces casi no dejarte mirar en paz. A si que hay ocasiones en las que aunque me guste las cosas que veo en la tienda, ya no entro por culpa del dependiente. Que le cuesta a uno ser agradable, cuanto más agradable seas más personas entraran en tu tienda. o esa es mi opinión.
Aunque a veces puede ser todo lo contrario. Esto lo digo porque llevo un año acudiendo a mercadillos con la bisutería que hago y cada vez que digo buenos días, buenas tardes.....primero no te contestan la gente y después es como si al decirles esto les obligaras a comprar y en mi caso es todo lo contrario.
Yo solo quiero ser educada.
Creo que no cuesta nada dar las gracias, y ser educado. Incluso creo que harás sonreír a la otra persona y te sentirás mucho mejor por el trato que recibirás.
Por lo que yo seguiré sonriendo, dando las gracias, los buenos días....porque ser educada no me cuesta sino que me hace sentirme orgullosa.
Por eso os pide que seáis educados siempre aunque no le apetezca a uno serlo.
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